Pestiños

Después de las Torrijas y las Angüelas llegó la hora de los pestiños. Pequeñitos, para poder saborearlos mejor.

 Ingredientes para los pestiños:

• 300 Grs. de Harina
• 100 Grs. de Aceite
• 50 Grs.de Anís en grano
• 15 Grs.de Ajonjolí
• 50 Grs. de Zumo de Naranja
• 25 Grs. de Vino Blanco (si se quiere se puede poner dulce)
• 1Copita de Anís Dulce
• 1 Puñado de Almendras Tostadas
• 3 Clavos de olor machacados
• 2 Cucharaditas de Canela

 Para freír:

• 1 Litro de Aceite de Oliva (sobrará)
• 1 Cáscara de Naranja
• 1 Cáscara de Limón
• 2 Clavos de Olor

 Ingredientes para endulzarlos:

• 300 grs. de Miel
• 50 grs. de Agua

Elaboración:

Ponemos a calentar en un recipiente los 100 ml. de aceite y cuando esté caliente freímos en él el anís, los clavos y el ajonjolí. En cuanto empiecen a dorarse los retiramos del aceite y los reservamos. El aceite lo retiramos igualmente del fuego y lo dejamos templas hasta que este casi frío.

Entonces tomamos otro recipiente  y pasamos a poner en primer lugar todos los líquidos y removemos bien.

A continuación incorporamos todos los demás ingredientes e igualmente lo removemos.

Pasamos entonces a ir añadiendo la harina poco a poco, removiendo a la vez, hasta que todo esté bien unido.

Volcamos entonces la masa en la mesa de amasar (o en la encimera de la cocina), y la trabajamos con las manos hasta que quede una masa compacta que no se pegue a nuestras manos. Debe quedar algo compacta.

Ponemos a calentar abundante aceite en una sartén y le incorporamos una cáscara de limón y otra de naranja, cada una con un clavo pinchado en ellas.

Mientras tanto vamos dando forma a los pestiños. Para ellos tomamos una pequeña porción de la masa y hacemos una bolita con ella que aplastaremos bien con la mano, bien con el rodillo. Doblamos los dos extremos hacia dentro y así hasta terminar toda la masa.

Cuando el aceite esté bien caliente retiramos las cáscaras y las desechamos, y comenzamos a freír los pestiños, cuidando mucho el aceite para que no se pongan demasiado pronto dorados y queden crudos por dentro. Tampoco hay que dejarlos que se quemen.

Los vamos apartando y poniendo en una bandeja.

Cuando todos estén fritos pasamos a confeccionar el almíbar poniendo la miel y la leche al fuego hasta que comience a hervir. Apartamos entonces del fuego y vamos sumergiendo en ellas los pestiños uno por uno, los retiramos y los pasamos a su bandeja definitiva (yo utilicé la del horno).

Hay que tener cuidado de que la miel tengan siempre la temperatura de punto de ebullición, si vemos que está algo más templada, la volveremos a poner al fuego.

Y nada más. Salieron exquisitos. Espero que los vuestros también.